Mirá, te voy a decir una cosa: no sirvo para las relaciones sociales. Estoy condenada a la soledad, personal o virtual. Tal vez por eso hablo con tanta libertad acá [tengo un cartel que dice #ahmiráquéinteresantegordafrígidaintentodeputa pegado en la frente].
¿Vos sabés lo que se siente tener una persona que sea tu cómplice en todo? Porque yo no.