domingo, 12 de octubre de 2014

Richar nació una vez en Buenos Aires hace mucho tiempo, donde fue comerciante, tipo jodido y millonario; nació una segunda vez viajando por el mundo como discipulo de Krishnamurti y nació una tercera vez en San Marcos Sierras donde renunció a todo y donde se convirtió en un alquimista de los licores, las berenjenas al escabeche y las pastas de aceitunas. Mientras tanto, en su cabeza, se iba recitando unos poemas que había decidido nunca llevar al papel. Pero un día, esos poemas empezaron a ser muchos y los fue soltando, y la gente los iba escuchando y quería más. Entonces, se anoto en un curso de encuadernado de libros, pero se dió cuenta que no quería agarrar una aguja ni una abrochadora, entonces, conoció la FLIA y a tres muchachos que estaban dispuestos a editar su libro. Durante 8 meses vino a nuestra casa a dictarnos sus poemas, los discutiamos, los ibamos corrigiendo, discutiamos más, hasta la última coma, y su cabeza se fue liberando. 70 poemas tiene El Río Suena, editado en enero del 2011 en San Marcos Sierras, ahora Richar es una estrella de rock y firma autógrafos. Sin embargo, en la feria de artesanos, en su puesto de exquisiteces, el no quiere vender su libro, porque no, porque si el agrega su libro junto a los frascos, quizás, un día, nosotros, los que hacemos y vendemos libros, nos pongamos a vender aceitunas.

Alejandro Raymond

(Lo robé de por ahí porque no hay tiempo para andar pidiendo permiso y menos para pedir perdón)

sábado, 11 de octubre de 2014

Féretro para dos

[...] Le agrado o se compadece de mí y me habla de fútbol: Boca le ganó a no sé quién, pero yo no sé nada de eso y respondo con monosílabos, mientras pienso "por qué no me preguntaste qué lees". Así hubiera podido enamorarte o sacarte el número de teléfono, tal vez...quién sabe [...]

viernes, 10 de octubre de 2014

Las cosas siempre tienden a mejorar en septiembre.

(Puedo decirlo ahora, que estamos en octubre)