lunes, 19 de diciembre de 2011

Dame 6 minutos para pensar que decirte, para recordar cómo era y maravillarme por todo lo que fui capaz. Para recordar porqué seguís acá conmigo y pensar que me encanta todo lo que juntos llegamos a hacer.

Dame 5 minutos más para prometerme una vez más 
que si lo extraño,
que si me hacía feliz,
volverá.

Sólo 4 minutos y un poquitito más...
Debo volver a la realidad.